La historia de Mozart y su familia se hace presente a lo largo de toda la ciudad, pero cobra especial dimensión en dos sitios fundamentales: su casa natal y la residencia Mozart. Te invitamos a conocer más detalles sobre cada una de las estos museos
Situada sobre un acantilado de piedra caliza en el mar Adriático, esta ciudad amurallada data de la época medieval y mantuvo su configuración de calles sinuosas, plazas e iglesias de estilo romano.
Es una ciudad tranquila, relajada y donde los visitantes pueden disfrutar de un pintoresco casco antiguo, hermosos restaurantes y tiendas, playas y todo lo que puedas imaginar encontrar sobre la vida de Napoleón.
Pompeya, permaneció cubierta por diecisiete siglos, y desde su redescubrimiento se transformó en un hito para el estudio y comprensión de la vida cotideana de la antigua Roma.
La historia confluyen con la fantasía de manera mágica en este castillo, símbolo de la región tocada por la obra literaria de Drácula.
Todo quien haya tenido la posibilidad de visitar Florencia sabe que es una ciudad realmente única. Paradigma del renacimiento, donde en cada rincón, en cada esquina, se respira arte.
Definitivamente ningún viaje a Irlanda del Norte estaría completo sin una visita a la famosa Calzada de los Gigantes.
La ciudad de Trogir es un lugar fascinante y fácil de recorrer. Pequeña, hermoso, familiar, y a su vez, sofisticada.
Un recorrido por los rincones de Italia donde vivió, creó y se conserva la obra de Caravaggio. Un pintor diferente, oscuro y controvertido.
El Palacio de Invierno, que hoy alberga el Museo Hermitage, es uno de los edificios más espléndidos de San Petersburgo.
